El pasado 6 de mayo se inició en Cuba, la semana de cine educativo, más conocida por sus siglas en cartelera, MICE: Muestra Internacional de Cine Educativo, iniciativa loable que bien vale analizar, en aras del bien de nuestros infantes y la educación integral que merecen recibir.
El cine educativo para niños y jóvenes se refiere a un tipo de película o producción audiovisual diseñada con el propósito de educar, informar y entretener a este público específico. Este tipo de cine va más allá del mero entretenimiento y busca fomentar el aprendizaje de una manera atractiva, dinámica y accesible para los más pequeños.
Las películas educativas se basan en temas curriculares y conceptos relevantes para la edad y el desarrollo de los niños y jóvenes. Utilizan un lenguaje audiovisual llamativo y dinámico, que incluye elementos como animaciones, música, efectos especiales e historias cautivadoras para captar la atención de la audiencia infantil y juvenil. Cada película educativa debe tener objetivos de aprendizaje definidos que se buscan alcanzar con su visionado.
El cine educativo no solo es receptivo, sino que también busca promover la participación activa de los niños y jóvenes a través de actividades, debates y reflexiones posteriores al visionado, los cuales ofrecen una perspectiva diferente y atractiva sobre los contenidos curriculares. Se trata de una herramienta poderosa que puede contribuir significativamente al aprendizaje, desarrollo personal y formación integral de los infantes.
La Muestra Internacional de Cine Educativo (MICE) en Cuba dedica su IV edición a Francia, y al personaje animado Elpidio Valdés, referente obligado de la cinematografía infantil animada en la isla. El evento se desarrollará del 6 al 12 de mayo y en él tendrán lugar varias actividades, entre ellas, la exhibición de materiales realizados por niños, adolescentes y jóvenes, talleres de formación audiovisual y clases magistrales.
Como parte del homenaje a la nación europea, el certamen centrará su atención en la obra del escritor y director de cine francés Michel Ocelot, conocido por sus películas de animación “Kirikú y la bruja” (1998) y “Azur y Asmar” (2006).
Durante el evento, en declaraciones a la prensa por medio de videoconferencia, se dio a conocer la entrevista a Josep Arbiol desde Valencia, España, fundador y presidente de la Red MICE de cine educativo, quien destacó la historia y los objetivos del certamen.
Al terminar, la hija de Juan Padrón, creador del emblemático personaje Elpidio Valdés, Silvia Padrón, manifestó su agradecimiento por celebrar al querido animado.
Destinado a la población infantil y juvenil, al profesorado, especialistas de los medios y público en general, durante el evento se exhibirán en diferentes provincias del país películas profesionales, de corte educativo, y audiovisuales realizados por niños, niñas y adolescentes en entornos de aprendizaje.
La presente edición conmemora el aniversario 50 de los dos primeros cortos animados del emblemático personaje cubano Elpidio Valdés, del realizador Juan Padrón, Premio Nacional de Cine.
Se proyectarán 171 audiovisuales de 15 países, cifra superior a otros años, siendo España el más representado. Niños y jóvenes votarán por el cortometraje preferido en cada sección y los materiales ganadores serán premiados en la ceremonia de clausura, el 11 de mayo.
El público habanero, en particular, podrá disfrutar de 24 filmes, y 171 animados, algunos de estrenos en la nación caribeña, procedentes de Francia, Alemania, Rusia, Suecia, Bulgaria, México, Japón y Cuba.
Elpidio Valdés, carismático héroe de los niños de Cuba.
Elpidio Valdés es un popular personaje de historietas infantiles cubanas, creado en 1970 por el caricaturista, ilustrador, historietista y guionista Juan Padrón (1947-2020). Fue pensado en un inicio como una historieta para ser publicada en la Revista Pionero con el objetivo de entretener y educar a los pioneros cubanos. Con posterioridad, dada su creciente popularidad, fue llevada a la televisión y luego al cine.
Elpidio Valdés es más que un simple personaje animado; es un ícono cultural que ha marcado a varias generaciones de niños cubanos. Su figura representa la lucha por la independencia, es un carismático mambí, un soldado del ejército independentista cubano durante la guerra contra el colonialismo español en el siglo XIX. Sus aventuras y batallas contra los españoles lo convierten en un símbolo de la lucha por la libertad y la autodeterminación.
Elpidio Valdés no es solo un guerrero valiente, sino también un personaje astuto e ingenioso. A menudo utiliza su inteligencia y creatividad para superar obstáculos y vencer a sus enemigos, lo que lo convierte en un modelo a seguir para los niños; las aventuras de Elpidio están llenas de humor y alegría, lo que lo hace un personaje divertido y atractivo para los niños. Sus ocurrencias y chistes lo convierten en un elemento que aporta diversión y entretenimiento a las historias.
No obstante el trasfondo humorístico del personaje, Elpidio Valdés siente un profundo amor por su patria y está dispuesto a luchar por ella hasta el final. Este sentimiento de patriotismo lo convierte en un ejemplo a seguir para los niños cubanos, inspirando en ellos el amor a la tierra natal y la defensa de los valores nacionales.
Elpidio Valdés es un personaje que representa la identidad cultural cubana. Su forma de hablar, su vestimenta y sus costumbres reflejan la cultura y tradiciones del pueblo, de la gente común. Esto lo convierte en un símbolo importante para la identidad nacional, un personaje querido y admirado que lucha por la libertad con ingenio, y humor.
Orgulloso de su grado de coronel del Ejército Libertador cubano que en el siglo XIX lucha por la independencia de la Patria frente al colonialismo español, al mando de un escuadrón de caballería, Elpidio es el líder ejemplar junto a sus compañeros María Silvia, Pepe el Corneta, Eutelia, Marcial, y su bravo caballo Palmiche, y ha alcanzado la categoría de referente cultural entre generaciones de niños y jóvenes que han disfrutado de sus aventuras como expresión de la nacionalidad cubana.
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Yo creo que el problema de Cuba no está ya en el independencia de España, sino en la apertura a otros países y abrirse al comercio. Actualmente no creo que sea el colonialismo ya tan lejano lo que haga que en Cuba falten los recursos más necesarios, como es la adecuada alimentación. Enseñar a pensar no es enseñar a conquistar. El héroe ha de transmitir valores de otro tipo no de defensa y conquista. Quizá el verdadero problema de Cuba esté hoy dentro. Me alegro de esa campaña educativa sobre cine pero un país necesita trabajo y recursos para poder seguir adelante. Ilusiones y metas.
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Tienes mucha razón Isabel, no lo pongas en duda. Gracias por tu comentario y bienvenida siempre a Lo Real Maravilloso.
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Un artículo muy interesante. No lo conocía ni Aal personaje ni el festival. Gracias por ilustranos
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Se trata de una serie de animados, que representan muy bien la idiosincrasia y afanes de los cubanos. Gracias por la lectura.
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Me parece una propuesta valiente y muy necesaria. Espero que haya sido un éxito. Abrazo.
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Algo no funciona en este país, o para ser más exacto: algo nunca ha funcionado en este país. El éxito en este caso es atemporal, y siquiera pertenece al pasado. Cordial abrazo
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