¿Coincidencia; o negligencia asesina?

Una “simple coincidencia” se refiere a una situación en la que dos o más cosas suceden sin ningún tipo de relación aparente entre ellas. Por ejemplo, si dos personas que no se conocen entre sí se encuentran en un lugar inesperado, podríamos decir que fue una coincidencia. En algunos casos, las coincidencias pueden parecer muy extrañas o incluso mágicas, pero generalmente son solo el resultado del azar.

Un hecho causado por una acción negligente, como el derrame de miles de toneladas de agua contaminada con isótopos radioactivos al mar, puede ser calificado como “contaminación ambiental”, la cual se refiere a la presencia o introducción en el medio ambiente de sustancias o elementos que causan efectos perjudiciales o dañinos para la salud humana, los seres vivos y los ecosistemas.

La contaminación ambiental es un delito grave que puede tener consecuencias perjudiciales para la salud humana. En algunos países, las penas por contaminación ambiental pueden incluir multas, trabajos comunitarios, prisión y otros tipos de sanciones.

Las penas por delitos de contaminación ambiental varían según el país y la gravedad del delito. En algunos países asiáticos, las penas por contaminación ambiental pueden incluir multas, trabajos comunitarios, prisión y otros tipos de sanciones. Por ejemplo, en China, las penas por contaminación ambiental pueden incluir multas de hasta 1 millón de yuanes (aproximadamente $156,000 USD) y hasta 15 días de detención administrativa. En India, las penas por contaminación ambiental pueden incluir multas de hasta 1 millón de rupias (aproximadamente $1,300 USD) y hasta 5 años de prisión. En Japón, las penas por contaminación ambiental pueden incluir multas de hasta 10 millones de yenes (aproximadamente $88,000 USD) y hasta 5 años de prisión.

Mayor gravedad tiene el hecho, cuando la contaminación ambiental es causada por la acción gubernamental y se demuestra el daño ocasionado por la acción contaminante sobre animales y humanos; en este caso específico las penas pueden ser más severas y tienen por agravante el daño a terceros países.

Luego de esta introducción, un tanto académica, pero necesaria, pasemos a la noticia.


Aparecen más de 1200 toneladas de sardinas muertas en costa japonesa.

Alrededor de 1.200 toneladas de sardinas muertas aparecieron la semana pasada a lo largo de un kilómetro en las costas de la ciudad de Hakodate, en la isla de Hokkaido, en el norte de Japón, meses después de que el país liberara al mar agua radioactiva tratada en la averiada planta nuclear de Fukushima.

Hallan 1.200 toneladas de peces muertos en las costas de Japón.

Las causas de tal mortalidad masiva aún son desconocidas y las autoridades están investigando el caso. La estación experimental de pesca de Hakodate, perteneciente a la Organización de Investigación de Hokkaido, explicó que a veces los peces llegan a la playa en grandes cantidades debido a cambios repentinos en la temperatura del agua o cuando huyen de los delfines y otros depredadores.

Se cree que los animales muertos en Hakodate formaban parte de un banco que migraba hacia el sur, hacia la isla central de Honshu, en esta época del año, agregó la estación.

Por otra parte, las autoridades japonesas criticaron duramente un reporte del tabloide británico Daily Mail que vinculó el fenómeno con la liberación de agua tratada de la central nuclear de Fukushima. El informe señaló que los peces muertos habían comenzado a llegar a la costa casi cuatro meses después de que la planta comenzara a descargar el agua, que contiene cantidades cuantificables del isótopo radiactivo tritio, en el océano Pacífico.

«No se han encontrado anomalías en los resultados de los estudios de seguimiento del agua», alegaron desde la Agencia de Pesca de Japón, citada por el medio local The Asahi Shimbun. «Estamos preocupados por la proliferación de información que no está basada en la evidencia científica», agregaron.

Asimismo, se reportó el 13 de diciembre la aparición de otro cardumen de sardinas muertas, también llamadas “sapa” en Japón, de entre 30 y 40 toneladas en un puerto de la localidad de Shima, en la isla de Honshu, a casi 900 kilómetros de distancia de Hakodate.

«Nunca antes había visto algo así», afirmó a los medios locales un pescador que trabaja en el puerto de Nakiri desde hace 25 años. «No fue hasta el año pasado que empezamos a pescar sapa en Nakiri. Me hace sentir que el ecosistema marino está cambiando», observó.

Tokio comenzó a verter al océano agua radioactiva de la central nuclear de Fukushima en agosto de 2023. Aunque el Gobierno japonés asegura que el agua residual ha sido purificada y no es peligrosa, se ha demostrado que aún contiene tritio.

China insta a realizar un control independiente del vertido de agua de la central nuclear de Fukushima.

La decisión de Japón ha provocado una fuerte oposición de los países vecinos. China prohibió las importaciones de productos marinos japoneses, una medida que Tokio ha criticado al afirmar que carece de base científica.


La central nuclear de Fukushima comenzó su tercera fase en noviembre de vertido de aguas residuales radiactivas al mar. El operador Tokyo Electric Power Company descargará 7.800 toneladas de agua tratada en dos lotes.

Este vertido se mantendrá durante décadas, ya que hay almacenadas alrededor de 1,34 millones de toneladas de aguas residuales radiactivas en unos 1.000 tanques.

Quedan décadas de vertimientos de agua radioactiva al mar. ¿Alguien puede responderme que pasara con aquellos que coman pescado y otros productos del mar capturados en dichas aguas?

#LoRealMaravilloso

#PeriodismoCrítico

https://www.volfredo.com/


15 respuestas a “¿Coincidencia; o negligencia asesina?

Replica a Republican Cancelar la respuesta